La planificación de tu trabajo es el paso más importante de un vertido de hormigón. RECUERDA: una vez empiezas, no hay marcha atrás.
1. Primer paso, marca el perímetro de tu losa y pon estacas en las esquinas.
2. Pon una línea de nivel entre las estacas para determinar la pendiente y como referencia para los tableros de forma.
3. Nivela el sitio. La nueva losa tendrá un grosor de aproximadamente 10 a 12 pulgadas; retira suficiente tierra para dar cuenta de esta cantidad de material.
4. Corta una tabla para moldear que sea 3” más larga que la losa nueva. Clávalo en las dos estacas de las esquinas para asegurarse de que está nivelado.
5. Refuerza el encofrado con estacas de 2 × 4' con dos pies de separación. Clava las abrazaderas directamente a la tabla para moldear con las cabezas en el interior del molde.
6. Refuerza las riostras con refuerzos clavados diagonalmente en el suelo y unidos a las riostras.
7. Corta una tabla de moldear que mida el largo exacto de la losa. Clávalo en el tablero a lo largo y en la estaca de la esquina opuesta, asegurándote de que esté nivelado y en escuadra con el lado largo. Refuerza el lado corto con un sistema de soportes (braces and kickers).
8. Continúe hasta el segundo lado largo y el último lado corto, manteniendo la escuadra y el nivel.
9. Confirma el nivel general de la losa nivelando de esquina a esquina.
10. Estima las cantidades de grava y concreto: largo x ancho por pies cuadrados. Divide la profundidad (en pulgadas) por 12. Multiplica la profundidad en pies por pies cuadrados para pies cúbicos.
11. CONSEJO: La grava viene en bolsas de 0,5 ft3. Las bolsas de 80# rinden 0.6 ft3, las bolsas de 60# rinden 0.45 ft3, las bolsas de 50# rinden 0.38 ft3. Se recomienda agregar un 10% a la estimación.
12. Base de grava compacta: con un total de 4 a 6 pulgadas.
13. Las losas calentadas o para interiores requerirán la colocación de láminas de poliéster de 4 milésimas de pulgada.
14. Las losas más grandes o de alto tráfico deben reforzarse con barras de refuerzo.
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A la hora de mezclar no se puede adivinar. El uso de la cantidad precisa de agua y las medidas exactas son pasos cruciales para lograr la resistencia correcta y el mejor acabado posible.
1. Si vas a mezclar en una carretilla, agregua primero la mezcla seca, crea una pequeña muesca en el centro y luego agregua 3/4 del agua.
2. Si mezclas en una batidora rotatoria, agrega aproximadamente 1/4 del agua antes de la mezcla seca. Agrega el agua restante después de agregar la mezcla seca.
3. Una bolsa de 80# de High-Strength Concrete requiere 3,5 cuartos de galón de agua; verifica el empaque de tu mezcla.
4. Mezcla durante aproximadamente tres minutos hasta que el agua esté completamente incorporada.
5. Cuando se mezcla correctamente, el concreto debe mantenerse unido cuando se junta, pero se deshace cuando se suelta.
EL CONCRETO EN BOLSA ESTÁ DISEÑADO PARA SER UNA MEZCLA RELATIVAMENTE SECA, EN CONTRASTE CON LA MEZCLA HÚMEDA Y FLUIDA QUE VERÍAS FUERA DE UN CAMIÓN DE MEZCLADO. ¡ESTO ES NORMAL!
¡Es hora de verter! Esta etapa es simple, pero asegúrate de moverte rápidamente. Los resultados se logran mejor con al menos un ayudante.
1. Vierte concreto en el molde y comienza a consolidar con una azada o rastrillo para concreto.
2. Sigue vertiendo hasta que el concreto llegue a la parte superior del molde.
3. Selecciona una pieza de madera de desecho muy recta para usarla como regla, idealmente lo suficientemente ancha como para abarcar toda la losa.
4. Arrastra la regla hacia atrás con un movimiento de sierra de ida y vuelta a lo largo de la losa para nivelar la superficie.
5. Usa una llana para alisar la superficie. La técnica es importante aquí: mantén el borde del frente ligeramente elevado en el empuje, levanta el mango para elevar el borde de atrás en el tirón de regreso.
6. ¡Tómate un descanso! Antes de pasar al acabado final hay que esperar a que el agua sobrante que ha subido a la superficie se evapore.
TEN CUIDADO DE NO TRABAJAR EN EXCESO LA SUPERFICIE EN ESTE PUNTO. HACER DEMASIADAS PASADA CON UNA LLANA PUEDE DESBORDAR LA SUPERFICIE CON AGUA, DEBILITANDO LA LOSA Y AUMENTANDO LA PROBABILIDAD DE AGRIETAMIENTO.
¡Listos para terminar! Una vez que el agua sobrante se haya evaporado de la superficie y el concreto esté duro como una huella dactilar, estarás listo para pasar al acabado final.
1. Pasa una herramienta para bordes entre la losa y el encofrado para que desmoldado sea limpio y crees un borde redondeado. Mueve la bordeadora hacia adelante y hacia atrás hasta que el borde esté liso y completamente separado del molde.
2. Corta las juntas de control usando una herramienta de ranurado y un 2×4 como borde recto. Las juntas de control deben colocarse a 2 o 3 veces el ancho de la losa. Una losa de 4” tendrá juntas de control separadas entre 8 y 12 pies.
3. Usa una llana de magnesio para dar un acabado liso final a la losa. En este paso se eliminarán las imperfecciones que queden después del paso de la llana, los bordes, las juntas de control, etc.
4. El paso anterior está terminado cuando brota una cantidad de cemento a la superficie. Esto se parece al sobrante de agua que sube a la superficie cuando se pasa la llana.
5. Se puede lograr un acabado de llana dura haciendo pasadas adicionales con una llana de acero, permitiendo que la losa se endurezca ligeramente entre pasadas.
6. Un acabado de escoba, popular en losas para exteriores, se logra arrastrando una escoba de concreto a lo largo de la losa. Realiza trazos ligeros y suaves, con la presión suficiente para crear una impresión en la superficie.
DECIDIR CUÁNDO EMPEZAR EL ACABADO ES DEFINITIVO. UTILIZA LA PRUEBA DE LA “HUELLA DEL DEDO” PARA ASEGURARTE DE QUE LA LOSA ESTÉ LO SUFICIENTEMENTE DURA. S, CUANDO LA LOSA ESTÁ LISTA DEBES PODER PRESIONAR EL CONCRETO APROXIMADAMENTE 1/4”, PERO NO MÁS.
Un paso final muy importante para lograr una gran losa, pero que a menudo se pasa por alto.
1. Aplica Concrete Cure 'N Seal a la superficie de la losa con un rociador de bomba o un rodillo. ¡No lo viertas directamente sobre la losa!
2. Cure ‘N Seal sella los poros en el concreto para bloquear la mayor cantidad de humedad posible en la losa. Esto asegura que la losa no pierda humedad prematuramente, lo que podría provocar grietas.
3. Incluso cuando se usa Cure 'N Seal, es fundamental mantener la losa húmeda durante varios días para promover un curado adecuado.
4. Cubre la losa con tela de costal húmeda, lávala con manguera frequentemente durante el día o coloqua un rociador junto a la losa. ¡Lo que sea con tal de no saltarte este paso!
EL CONCRETO CURADO APROPIADAMENTE PUEDE SER HASTA EL DOBLE DE RESISTENTE QUE EL CONCRETO NO CURADO, Y TENDRÁ UNA VIDA ÚTIL SIGNIFICATIVAMENTE MÁS LARGA.